lunes, 11 de julio de 2011

Menú Cerrado



"Tomo nota" por Berts @idar


Resulta, prácticamente para todo el mundo, imposible no haberlo probado nunca, pues es su distribución enorme e inusitadamente efectiva.

A estos puntos llega gente de todo tipo y condición. Unos en sus estupendísimos coches, otros en medios más modestos o incluso a pie. A veces, incluso, mesa y mantel se hallan en torno al propio desplazamiento.
Como suele acontecer con las cosas cotidianas, los más afortunados deben conformarse con catarlo en pequeñas y aisladas dosis mientras la gente corriente comulga con ello más frecuentemente. No se puede decir, no obstante, que el que no lo haya probado es porque no lo ha querido.

Cómo te dé la gana. Puedes dejar que se te llene la boca con palabras tan grandilocuentes como derechos, responsabilidad, humanidad o respeto. Puedes mostrar tu indignación de forma más o menos vehemente, olvidándote incluso de tus verdaderas desgracias, o de las de los demás; de las de aquellos que repiten día tras día. Puedes mostrar tu educación mediante palabras precisas, si es que las encuentras, e imprimirlas el tono adecuado para que signifiquen lo que en realidad deseas que signifiquen. Lo mejor, tal vez, sea darte el gustazo de perder la paciencia y la educación, y verte respaldado por una masa de comensales que te arrope y se atreva a armarse de migas de pan. Si es tu opción, puedes agachar la cabeza, o llevarte las manos a ella, o solicitar una ajena, o llorar, o gritar, o lo que se te ocurra. Se puede pedir de todas las maneras.

No te preocupes por el precio, todos los bolsillos se adaptan a él. En este punto no hay diferencias, clases ni categorías.

Tú llegas y con una sonrisa, esto sólo si tienes mala suerte, se te lee la carta. Todos los días, plato único, barra libre:
“Son Lentejas”.


Safe Creative #1107119657091

3 comentarios:

  1. Hola, Carmelo: Llegué hasta aquí por indicación de Pablo Garcinuño. Incluyo un enlace a tu blog desde el mío, donde encuntras otros muchos links a blogs especializados en el microrrelato.
    Un cordial saludo,
    PABLO GONZ

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias, Pablo. Huelga decir que, en este mes escaso en que trato de asomarme a lo que tantos os dedicais con tanto acierto, he leido tu nombre muchas veces. Tal vez la primera ocasión fue gracias al vendaval de micros, en el que no pude participar más que en un par de juegos, pero que del que pude disfrutar plenamente como lector. Sólo puedo agradecerte el gesto y la molestia que te has tomado al asomarte por aquí. Si bien he de confesar que nunca había entrado con tiempo en tu blog hasta esta mañana, es una recomendación que haré más allá del espacio de sugerencias desde descontrato.
    Muchas Gracias.

    ResponderEliminar
  3. Gracias a ti por escribir, Carmelo. Seguimos leyéndonos.
    Más abrazos,
    PABLO GONZ

    ResponderEliminar